El escritor y poeta mexicano publica un ensayo poderoso y deslumbrante sobre la presencia del dolor en la literatura y su capacidad transformadora.
Cubierta del libro “Las cámaras secretas”. Luis Jorge Boone. Editorial Siruela, 2022
“El enfermo es Scherezade de sí mismo. Encarna una historia que empieza en los malestares, se desarrolla en forma de síntomas, encuentra su clímax en el desvelamiento del diagnóstico, que continúa en el tratamiento y llega a su final, con la muerte o la salud”. Este párrafo forma parte de la introducción al ensayo ‘Las cámaras secretas. Sobre la enfermedad, el dolor y el cuerpo en la literatura’, escrito por Luis Jorge Boone y publicado por la Editorial Siruela. Tanto el contenido como la estructura y el estilo nos dan pistas sobre el tipo de libro al que nos enfrentamos: un ensayo que también es poesía, y que se adentra en el dolor como concepto pero también refleja la identidad del propio autor. El poeta y narrador mexicano recoge en sus páginas diez años de investigación y reflexión sobre un tema muy poco común en el debate social: el dolor y la enfermedad, dos tabús en un mundo en el que cualquier sufrimiento es erradicado, e incluso negado, desde sus orígenes. El enfoque del autor sobre un tema tan duro y complicado hace del libro un auténtico placer: a través de una prosa que es también ensayo y poesía, nos invita a tomar consciencia con la importancia del dolor como transformador de la vida y del arte. Un dolor que puede ser tan insoportable y demoledor como generador de cambio y de creación, y que se va analizando capítulo a capítulo. Boone nos invita aquí a descubrir “la enfermedad como espejo y relato. El dolor como vehículo de transformaciones. El cuerpo como infierno e impensado paraíso. El amor y su ambigua naturaleza de gozoso tormento”. Y cómo resistirse…
Luis Jorge Boone. Foto del Archivo El Universal en eluniversal.com.mx
Dentro de una clasificación que él mismo define como “libros del cuerpo feliz y libros del cuerpo doliente”, el escritor escoge, evidentemente, hablar sobre los segundos. Como muy acertadamente señala, cuando el dolor o la enfermedad aparecen en un relato nunca son meros accesorios: su vocación es de protagonismo. Una simple molestia puede convertirse en una bola de nieve que vaya creciendo y creciendo, hasta absorber las páginas y volverse el auténtico leitmotiv de la trama. A lo largo del libro, Boone estructura una serie de capítulos con títulos como Diagnosis, La lucha con el ángel o Breve antología del amor crepuscular. En ellos articula un texto que nos hace fluir entre las reflexiones que el autor ha ido destilando, tras mucho leer y mucho experimentar, y los distintos autores y autoras que han tratado el tema del dolor y la enfermedad en sus obras. Nombres como Susan Sontag, Thomas Mann, John Banville o H. P. Lovecraft, entre otros, aparecen en las páginas y brillan bajo el acertado y hermoso análisis del autor, que no duda en reflejar también el tema del mal de amores (un dolor y una enfermedad más, al fin y al cabo) o en hablar de su propia “historia personal del dolor” en los capítulos finales. Nada mejor que adentrarse en estas “cámaras secretas”, tan reconocibles como ocultas, para encontrar nuestro propio reflejo doliente y vivir desde dentro las historias más desgarradoras y brillantes de la literatura.