Donde ella estaba, estaba el paraíso: el título del último libro de poemas de Javier Santiso es la puerta de entrada a unas páginas llenas de versos crudos, potentes y sin concesiones.
Cubierta de Donde ella estaba, estaba el paraíso (2019), de Javier Santiso. Editorial Reino de Cordelia
“‘Donde ella estaba, estaba el paraíso’ es un libro de versos que se queda a vivir en el cerebro de sus lectores de forma recurrente por la denuncia que conlleva, por el tono acre y amargo con que está escrito”. Con estas palabras, Luis Alberto de Cuenca da comienzo al prólogo que encabeza el último libro de poemas de Javier Santiso. Una muy cuidada recopilación de poemas crudos, concisos y directos, en los que la poesía sin concesiones se convierte tanto en luz como en oscuridad. “Escribir cómo / hierve violenta / la lava de la vida”: así escribe Santiso cuando refleja su particular visión del paraíso y el infierno; del jardín del edén pasado por el filtro del amor más destructivo, y a la vez, más constructor. El poeta apenas deja un resquicio a la esperanza, pero deja entrever destellos de luz entre la celosía de sus versos. Centrados en de forma casi recurrente en la figura de la mujer, abarca temas incómodos y terribles como la violencia de género, la prostitución o el desamor en la pareja. Y aún así, como bien señala el autor del prólogo, hay “una línea de luz que se superpone al horror desplegado a lo largo del poemario: y es la frase del título, extraída de los maravillosos ‘Diarios de Adán y Eva’ de Mark Twain”.
Retrato de Javier Santiso
El autor del libro, economista de profesión, no oculta su pasión por la poesía y la literatura. En 2017 funda su propia editorial, La Cama Sol (responsable de libros como Umbral de Pájaros, que aúna las obras de Soledad Sevilla y Eugenio Andrade), con la idea de fomentar el diálogo y la interacción entre las obras de destacados artistas plásticos y los versos de los autores más fascinantes. Su pasión por la poesía le ha llevado también a traducir a algunos escritores hasta ahora desconocidos en España, como el malayo Latiff Mohidin. En 2017 Santiso publica su primer libro de poemas, El octavo día; en 2018 lanza el volumen Antes de que venga la noche, donde ilumina los cuadros de la pintora Lita Cabellut con sus propios versos. Su trabajo como economista y editor no interfiere en su actividad poética, porque tal y como se lee en el prólogo “escribir versos no es una patente de corso de filólogos y humanistas, sino de todos los hombres, tengan el oficio que tengan, siempre que contemplen el mundo con ojos de poeta, que es el caso de Javier.” Así, los poemas que inundan las páginas de Donde ella estaba, estaba el paraíso brillan como vetas de pirita en la roca gracias a esas palabras que (tal y como las sueña el autor) no tienen cicatrices.